El presidente Luis Lacalle Pou criticó el impuesto que la Intendencia de Montevideo (IMM) pretende cobrar a vehículos de transporte de líquidos inflamables y gas licuado a granel, y dijo que mientras que el Poder Ejecutivo evita cargar con sobreprecio a las combustibles, el proyecto municipal «va a contramano de una política de estado, de una política de gobierno» Y agregó, «nosotros estamos tratando de transparentar el precio de los combustibles, hacerlos más adecuados a lo que realmente nos cuesta como uruguayos».
Lacalle dijo que » es un impuesto totalmente traído de los pelos», y adelantó que que su Administración apelará la decisión de acuerdo al recurso que establece la Constitución para estos casos.
Mientras tanto la Intendenta de Montevideo Carolina Cosse reaccionó contra el presidente, que había dicho que “el gobierno baja impuestos y la Intendencia de Montevideo pone impuestos ” y argumentó “yo me pregunto si este presidente no sabe que le subió dos puntos de IVA a toda la población, en cuanto asumió” .
La intendenta, que había justificado la propuesta impositiva en el «daño (y el) esfuerzo que le suponen a la ciudad“ el peso de los camiones que distribuyen los combustibles, especificó que el nuevo gravamen «a lo sumo podría afectar en un quinto de peso por litro -en un tanque de 45 litros son nueve pesos-”.