La ciudad de Nueva York y el área metropolitana se inundaron de repente este viernes cuando lluvias torrenciales cayeron sobre la ciudad. Entre otras calamidades cerraron líneas enteras en el metro de Manhattan, muchas carreteras dejaron de ser transitables, los niños en las escuelas tuvieron que ser trasladados a los pisos superiores y las alertas meteorológicas comenzaron a sonar en los teléfonos celulares de quienes pasaron de presenciar una lluvia ligera otra intensa en pocos minutos.
Mientras la gobernadora del Estado Kathy Hochul declaró el estado de emergencia, el alcalde de la ciudad, Eric Adams dijo que estas lluvias eran un caso que «no podía ser tomado a la ligera». Quienes tuvieron la precaución de quedarse en sus casas no tuvieron mayores problemas, pero la mayaría de la población fue tomada por sorpresa a pesar de que el Servicio Nacional de Meteorología envió señales de advertencia a través de la telefonía celular, alertando «inundación repentinas considerable».
Al principio, parecía que el viernes la ciudad de Nueva York simplemente recibiría lluvias ligeras, pero el miércoles por la noche una tormenta que estaba al sur de la ciudad y se quedaría en la costa y sobre el océano empezó a subir hacia el norte y todo cambio repentinamente cuando se encontró, ya sobre la ciudad, con un sistema de baja presión que venía desde el oeste. Eso desencadenó el desastre.
Desde la Universidad de Columbia los especialistas responsabilizaron al cambio climático con parte de la culpa.ya que a medida que la atmósfera se calienta, puede retener más humedad, mientras que los expertos del Servicio Nacional de Meteorología coincidían en que los sistemas de baja presión «ahora tienen mayores cantidades de vapor de agua disponibles», lo que en conjunto con el «océano Atlantico más cálido combinado con aire más cálido, la atmósfera está preparada para producir más lluvia»
No obstante las inundaciones del viernes no fueron el producto de una gran tormenta tropical ni de las típicas fuertes que provienen del noreste –comunes en la región de Nueva Inglaterra– sino de fenómenos con «características a menor escala, como bandas de fuertes lluvias y tormentas dispersas»que son más «difíciles de predecir con un tiempo significativo de antelación».
Y aún cuando la presencia de varias tormentas de menor escala fueron detectadas el jueves por los servicios meteorológicos, otro factor se unió para provocar estas inundaciones inusuales» Nueva York es una ciudad altamente pavimentada con un drenaje deficiente.
En tanto, con metros parados que obligaron a frustrados usuarios a volver caminando a sus casas en medio de un caos, este viernes fue el día mas lluvioso que se haya registrado en el Aeropuerto John F. Kennedy desde que se llevan registros modernos.