El ministro de Interior Luis Alberto Heber concurrirá al Senado en régimen de comisión general el próximo martes. La resolución fue tomada ayer por la Cámara Alta ante la solicitud del ministro, cuya gestión había sido cuestionada por el Frente Amplio debido a la participación de funcionarios del Ministerio del Interior en una investigación ilegal solicitada por el exsenador Gustavo Penadés para desarrollar su teoría del caso.
La decisión de recibir a Heber el martes fue aprobada con el voto de la oposición, luego que el Frente Amplio anunciara el lunes que interpelaría al ministro por «el caso Marset, caso Astesiano, actitud institucional ante el caso Penadés». Sin embargo, la coalición opositora aún no descarta interpelar a Heber, según lo manifestó la senadora frenteamplista Amanda Della Ventura quien aclaró que haber votado la comparecencia de Heber en comisión general no frena el pedido de interpelación al ministro.
Heber se había reunido con el presidente Luis Lacalle para informarle sobre los argumentos que expondrá en el Parlamento, insistiendo que gracias a la Policía se descubrió una investigación paralela e irregular dirigida por Penadés y colaboradores. En ese mismo orden este martes subsecretario del Interior, Guillermo Maciel, anunció que “el ministro está deseoso de comparecer para dar las explicaciones del caso, en el mismo tenor en que estamos hablando nosotros: en el buen funcionamiento (del sistema) y en que no se puede enlodar a toda la Policía por algunos funcionarios infieles, que hubo ahora y que hubo antes”.
Maciel insistió con que «la policía se depura a si misma» y argumentó que fue por la labor policial que el exdirector de la cárcel de Santiago Vázquez, Carlos Taroco y dos funcionarios más del ministerio, fueron responsabilizados por entregar ilegalmente información a Penadés, quien la utilizó para desarrollar su defensa en el caso de abuso sexual de menores que se sigue en su contra El subsecretario también en el caso de acceso irregular a los audios del sistema de registro de escuchas de «El Guardian», “el ministerio en menos de 24 horas ubicó a esos dos policías” infractores.