Nuestro colaborador, el abogado – docente- novelista y musicólogo Luis Fernando Iglesias, co-produce para la fundación PRO SODRE, varios encuentros culturales en el hall de dicha institución.
Esta vez los disertantes eran Alvaro Ahunchain – AA, Patricia Lussich – PL y el consagrado músico Gonzalo Moreira, GM. Este último, que calza siete décadas, vive a 167 kilómetros de Montevideo, fue (y es) uno de los íconos de la música en la corta etapa liberalizante de la dictadura, con dos emprendimientos: Rumbos y el espectáculo para niños y opositores, Canciones para no Dormir la Siesta.
Cambio, esperanza y libertad.
Aunque ninguno de los oyentes descontaba el amor de GM por la izquierda, este confiesa que no la apoya explícitamente o bien prefiere ser neutral. Explica que ello le da objetividad y distancia. Quién pone sentimientos personales en una campaña política no es un buen profesional.
Dijo que sus productos musicales están explotando hace tres campañas electorales, siendo requeridos por todas las expresiones políticas con trascendencia electoral. En las internas fueron 10 candidatos los contratantes.
Confesó que los bunkers, a veces, ya le traen la letra confeccionada.
Contó que muchas veces los candidatos no aparecen en su estudio de música. El Economista Ernesto Talvi fue una de las excepciones.
Tres palabras no pueden faltar en un buen jingle, cambio, esperanza y libertad.
Si una de sus creaciones no se transforma en un hit que mueve las fibras íntimas, considera que fracasó.
Coincide con Patricia Lussich en que pocas veces el vencedor de una contienda electoral es él que hizo la mejor campaña publicitaria.
La etapa colorada de la política.
AA fue uno de los creativos de las campañas publicitarias que llevaron a Julio María Sanguinetti – JMS- a la presidencia de la República en 1984, pero fue derrotado su cliente Luis Hierro López en la interna con Jorge Batlle. Trabajó con Carlos Nuñez, un militante de izquierda tupamaro en la empresa Corporación Publicidad.
Dijo que casi siempre votó por las propuestas que lo contrataron salvo en el referendum por la derogación de la Ley de Caducidad donde él votó por la opción perdidosa. Si el Frente Amplio lo contratase también haría una excepción a dicha costumbre personal, aunque se siente tan antagónico con la izquierda que no podría trabajar para ella.
Manifestó que es una falsa creencia la de que el que más gasta en publicidad seguramente sea el ganador.
Dijo que si algo caracteriza a un aspirante a la presidencia, son sus dotes de autodidacta, por lo tanto es muy difícil influir en ellos. Para colmo siempre están rodeados de adulones.
El publicista dice que no hay postulantes perfectos por lo que él prefiere recalcar sus dotes naturales y auténticas.
Palabras de recuerdo.
AA tuvo palabras de recuerdo: Para el publicista José María Reyes que a un Batlle Ibañez maltrecho, lo revivió con un jingle y una frase publicitaria: “ La gente se merece que le canten la justa…”
Para Horacio Buscaglia y su “ Paradoja”.
Para la fallecida mano derecha de JMS, Walter Nessi, que pese a integrar el riñón del gobierno que aspiraba a ser re-elegido, sabía que el recordado catedrático y político, entonces vicepresidente, Enrique Tarigo, no le iba a ganar la interna a Jorge Batlle.
A su círculo íntimo, le solía decir que para ganar una elección, el político debe tener una imagen paternal. Si no lucís bien con un niño en brazos, mejor dedícate a otra cosa…y ese era el “debe” del apreciado aspirante.
Los abrazos.
También expresó que los acuerdos políticos entre anteriores rivales en una elección interna deben llevarse a imágenes publicitarias a través de abrazos. El derrotado candidato Hierro López fue a abrazar a Batlle Ibáñez. La broma que le siguió es que el hijo de Luis Batlle Berres se abrazó a un Hierro caliente.
Tabaré Vázquez le había dicho en una entrevista al periodista Cesar di Candia que él no permitiría que se tomen imágenes del mismo abrazando a su rival derrotado, el economista Danilo Astori, ya que si eso pasase, no le creería ni Caperucita Roja. En este caso, los publicistas pudieron más.
Candidato versus detergente.
PL dijo que no es lo mismo un candidato que un producto de limpieza. Los políticos, a diferencia del detergente, no hacen caso a sus asesores de imagen. Además, una buena campaña publicitaria no logra per se que un candidato sea elegido.
Expresó que nunca participó de una agenda electoral pero como docente enseña que la función de la publicidad es canalizar lo que sienten las masas que ya decidieron su voto.
Dijo que su tarea es cada vez más difícil por la decadencia educativa de los sectores menos privilegiados.
AA le contó a la audiencia que ninguna elección es definida por la campaña publicitaria pero ayudan, tal vez el público las sobre-estima.
Si no queda más remedio que comparar la campaña publicitaria de un detergente con la de un candidato hay unos pocos conceptos publicitarios que se le aplican a ambas, la notoriedad de marca y la potenciación. En el mundo de la publicidad como en el real, las percepciones subjetivas predominan.
El disruptivo Alvaro Ojeda.
El encuentro cultural coincidió con la emisión del spot del abogado penalista de cuarenta años, Alvaro Ojeda, minoría mayor en las internas del partido de la Defensa, pero que cuenta con el apoyo de dos hijos de los últimos líderes del coloradismo, Matías Bordaberry Oribe y Julio Luis Sanguinetti.
El moderador no dejó pasar la oportunidad e interrogó a los panelistas.
AA dijo que es amigo del abogado y recalcó las dotes intelectuales de su publicista, Aleix Sanmartín.
Todos los asistentes e incluso los disertantes pertenecen a un sector etario y cultural que no era el destinatario de la comunicación.
Para AA es posible que su jefe de campaña “ haya hecho una moña de más”.
Javier Milei.
También hablaron del triunfo del Economista que se autopercibe libertario. GM dijo que ganó gracias a un carisma que solo se valida en la hermana república. AA, que estaba en una gran noche, expresó: el fenómeno Milei es propio de un país desahuciado culturalmente.