El desafío al segundo en la línea de sucesión presidencial fue promovido por el representante republicano por el Estado de Florida, Matt Gaetz, a quien se le sumó la derecha radical de su partido y los representantes demócratas. McCarthy fue destituído en una votación de 216 a 210 e inmediatamente anunció que no se postularía nuevamente.
McCarthy dijo que que los 8 representantes republicanos que votaron en su contra «no pueden decir que son conservadores porque están enojados y son caóticos» y los acusó de permitir que los demócratas aprovecharan la oportunidad para recuperar su poder en el cuerpo legislativo.
No obstante su destitución, McCarthy rechazó la idea de renunciar a su banca y preguntado sobre su consejo para el próximo presidente de la Cámara sugirió «cambiar las reglas».
Los representantes republicanos abandonaron el Capitolio sin un camino claro a seguir, mientras que McCarthy se afirmó, «hice historia, ¿no?