Ryan Palmeter, un racista blanco de 21 años fue el asesino que disparó este sábado en un supermercado Dollar General de Jacksonville, Florida, matando a tres afrodescendientes de 19, 29 y 52 años de edad; las víctimas, dos hombres y una mujer, fueron impactadas dentro y fuera de la tienda. Palmeter había participado en un incidente de violencia doméstica en 2016 y, un año después, fue internado para una evaluación psiquiátrica; no obstante pudo comprar legalmente las armas que utilizó en asesinato –una pistola Glock y un rifle semiautomático AR-15– una de las cuales lucía esvásticas dibujadas.
El criminal se suicidó luego del ataque pero durante el incidente envió un mensaje de texto a su padre, con quien vivía, y le pidió que fuese a su computadora donde se encontró una nota de suicidio, su testamento y escritos racistas. Los padres alertaron a las autoridades pero el crimen ya se había consumado.
El supermercado en donde ocurrió el incidente está cerca de un histórico centro de enseñanza –la Universidad Edward Walters– donde Palmer pretendió ingresar momentos antes del tiroteo y no lo logró al negarse a mostrar su identificación a un guardia de seguridad de la institución; un vocero de la universidad dijo que al retirarse de la institución se vio a Palmer colocarse una máscara y un chaleco antibalas. De acuerdo a lo informado el domingo por el shérif de Jacksonville, T.K Waters, no parece que Palmeter tuviese intenciones de atacar a la Universidad.
El ataque masivo coincidió con el 60 aniversario del discurso I have a dream (Tengo un sueño) de Martin Luter King pronunciado en Washington en la marcha «por Trabajo y Libertad» el 28 de agosto de 1963.
Refiriéndose al problema de odio racial y al asesinato, la alcaldesa de Jacksonville, Donna Deegan, manifestó que «oí a algunas personas decir que parte de la retórica que escuchamos realmente no representa lo que está en los corazones de las personas, es solo el juego. Es solo el juego político. Esas tres personas que perdieron la vida, eso no es un juego. Esa es la realidad de lo que estamos enfrentando. Por favor, dejemos de vernos mutuamente como piezas en un tablero de juego, y por favor, empecemos a reconocer la humanidad de los demás».
Por su parte, el Procurador Genera estadounidense, Merrick B. Garland comentó el asesinato diciendo que «ninguna persona en este país debería tener que vivir con el temor a la violencia alimentada por el odio, y ninguna familia debería tener que lamentar la pérdida de un ser querido debido a la intolerancia y el odio. Una de las primeras prioridades del Departamento de Justicia al ser fundado en 1870 fue llevar ante la justicia a supremacistas blancos que utilizaban la violencia para aterrorizar a los afroamericanos. Esa sigue siendo nuestra urgente responsabilidad hoy.»