En medio de los reclamos al Fondo Monetario Internacional (FMI) por parte del presidente argentino Alberto Fernández en el marco de la III Cumbre de Estados Latinoamericanos y Caribeños y la Union Europea, y de la vicepresidenta Cristina Kirchner, durante la conmemoración del aniversario de Aerolíneas Argentinas, el ministro de Economía argentino, Sergio Massa, continua las negociaciones con el FMI a través de un equipo técnico enviado a Washington DC.
Fernández dijo en la Cumbre que a pesar de la pandemia y los efectos del cambio climático —en Argentina se estima una pérdida de 20 mil millones de dólares por la sequía— “el Fondo Monetario Internacional no ha podido encontrar el tiempo y las voluntades para revisar su política de sobrecargos y el capital disponible de los bancos de desarrollo continúa siendo insuficiente”, por su parte, Kirchner exigió al FMI que se responsabilizase por sus errores.
El viceministro de Economía, Gabriel Rubinstein; el vicepresidente del Banco Central, Lisandro Cleri, y uno de sus directores, Jorge Carrera ya están en la capital estadounidense mientras se espera la llegada de Leonardo Madcur, jefe de asesores del ministerio y el secretario de Hacienda, Raúl Rigo.
Los equipos negociadores ya están avanzando en la la quinta revisión del programa respaldado por el Fondo y se espera que se logre un acuerdo técnico que permita un nuevo desembolso para Argentina.
Massa, que desde hace unas semanas atrás es el principal candidato a la presidencia por Union por la Patria (peronismo), había manifestado que el acuerdo era posible, aunque el ministro está urgido por los tiempos: el 31 de julio el Directorio Ejecutivo del FMI suspende su actividad hasta dos días antes de las primarias argentinas, el 13 de agosto.
Un posible acuerdo podría requerir un ajuste fiscal para su aprobación, algo que si bien no conviene a los fines electorales del ministro, es preferible a llegar a las elecciones sin un desembolso que evite profundizar la actual crisis económica.