Análisis por Antonio Labandera
Dentro de la coalición de gobierno no paran las especulaciones sobre el perfilamiento de Cabildo Abierto, que, además, continúa siendo criticados por no alinearse ni con los tiempos ni con la estrategia del presidente Luis Lacalle Pou. No es la primera vez que integrantes de la alianza gubernamental analizan la actitud del líder cabildante, Guido Manini Ríos y aprovechan para marcar diferencias con sus decisiones. En esta oportunidad la crítica recayó por el anuncio de la movilización de Cabildo para recolectar firmas que permita la consulta popular sobre la reestructuración de deudas de las familias uruguayas.
El anuncio de Manini no fue intempestivo. El senador ya había advertido varias veces que si no se encontraba una rápida solución al endeudamiento de los uruguayos, seguiría adelante tras una consulta plebiscitaria. Sin embargo, dentro de la coalición esta estrategia es vista como una cortina de humo a los recientes problemas internos de Cabildo que quedó descolocado por la salida de Irene Moreira del ministerio de Vivienda. La ahora senadora Moreira y esposa de Manini, dejó la cartera por decisión del presidente Lacalle ante un escándalo por la adjudicación discrecional de viviendas a militantes cabildantes.
No obstante esa interpretación, desde filas de Cabildo se ha insistido que el reclamo para la reestructuración de las deudas por vía legislativa no es nueva, y que la inacción de las bancadas de la coalición de gobierno para atender el tema disparó el gatillo de la consulta popular.
El cruce de recriminaciones y las causas y explicaciones del misma no es nuevo. En el pasado Cabildo ha medido fuerzas dentro de la coalición de gobierno y sus legisladores ya amenazaron o votaron distinto a sus socios, acompañando a la oposición. Esa fue la actitud de Cabildo respecto a la reforma jubilatoria y, sin ir más lejos, en la última interpelación al ministro del Interior Luis Alberto Heber.
En la medida que se acerca el tiempo electoral y las encuestas marcan un descenso de la intención de voto a Cabildo, agregado esto a un posible liderazgo de Pedro Bordaberry en el Partido Colorado –una opción atractiva para ciertos cabildantes con un origen político compartido– todo hace pensar que Cabildo insistirá con sus esfuerzos para marcar un perfil propio, no complaciente con el gobierno.