Gabriel Terra alcanza la presidencia el mismo año que Hitler asume en la Cancillería alemana.
Casi todos los gobiernos autoritarios de la época del 30, basaron su modelo económico en dos pilares fundamentales: el intervencionismo económico del Estado y la concentración del poder político en un gobierno fuerte como respuesta a la radicalización del movimiento obrero.
El 17 de noviembre de 1933 Uruguay firma el acuerdo de cooperación con la Alemania Nazi. Las negociaciones estuvieron a cargo del director del Banco República Ing. José Serrato y del director de Comercio Exterior Mateo Márquez Castro. Por la Cámara de Comercio Alemana firmaron los señores Quinke, Berlitt y Bokelman.
El 15 de febrero de 1934 la Comisión Permanente de la Asamblea Deliberante (órgano creado por la dictadura) sancionó una ley encomendando a la U.T.E. la construcción de una obra para la explotación de energía eléctrica en el Río Negro, hoy represa del Rincón de Bonete.
Los uruguayos condecorados por Hitler
La estrecha colaboración entre los nazis y Terra, determinó que algunos integrantes de su gobierno fueran condecorados por el propio Hitler con el Águila de Oro. Ellos fueron el Dr. Martín Echegoyen ministro de Obra Públicas, Dr. José Espalter ministro de Relaciones Exteriores, Ing. Bernardo Kayel presidente de UTE y el Ing. Salvador Massons, director de obras de la represa. El caso de Martín Echegoyen es muy especial, pues además de integrar el gabinete del dictador Terra, fue el primer presidente del Consejo de Estado creado por el gobierno de facto en 1973 como órgano que suplantó al Poder Legislativo. Abogado, legislador, ministro e integrante en tres períodos del Consejo de Gobierno surgido de la Constitución de 1952.
Es recordado también por una sesión del senado en 1972, convocada para denunciar la existencia del Escuadrón de la Muerte, en donde planteó que el mencionado tema no podía tomarse como objeto de debate parlamentario en virtud de que el Escuadrón de la Muerte carecía de personería jurídica. En la noche del 26 de junio de 1973 no participó de la sesión parlamentaria porque apoyó sin ninguna vacilación el golpe de Estado.
El hombre polifuncional en democracia y dictadura
“Hemos oído vuestra autorizada palabra de magistrado, y destinamos nuestra formal conformidad tanto al móvil que la inspira como a los que han determinado el conjunto de providencias con que habéis realizado desde nuestras primeras etapas, una feliz concordancia entre el anhelo popular y vuestra acertada decisión. En nombre del Consejo, este incorpora su espíritu llano y patriótico, a la historia con la que le habéis iniciado para honrar a la nación y elevar sus obras. Debo decir ahora que vuestro designio es cruzar bajo signo apacible los días que vienen: liberar los tiempos de nuestra tierra de la violenta literatura con que el país ha soportado resignadamente en sacrificio de su razón de vivir, a cambio de la superstición demagógica , ante la pretensión de radicar la democracia autoritaria de la que el profesor Lavagna recuerda que ella tiene su origen en la revolución comunista, propia por razones históricas , de la Europa Oriental y del Asia inspirada en Marx y Engels y ensamblada a la inspiración comunista de Lenin , de Stalin y de sus asesores. Confesáis que el concepto de que la acción de los partidos políticos no impone la supresión de la intolerancia, una virtud antigua siempre confortante y civilizadora por encima de la magia de los demiurgos . Si la grandeza de la nación clama para sí voces de esperanza sin la obsesión del trofeo fácil de la pasión detonante, ha de ser sin desmedro de aquel plebiscito emplazado más allá de los sectores personales, siempre abierto, como lo concebía Renán, cotidianamente, al alma del bien colectivo. Señor presidente de la República en esto nos deja vuestra condigna atención”. Discurso de Martín Echegoyen al asumir la presidencia del Consejo de Estado, 19 de diciembre de 1973. (Extraído del libro Tiempos de Dictadura de Virginia Martínez)
El 11 de noviembre del 2022, familiares de alumnos que acuden a la escuela Nº 83 proponen quitar el nombre de Martín Echegoyen a la misma y cambiarlo por el de Paulina Luisi. En la casa del directorio del Partido Nacional, el cuadro del condecorado por Hitler y primer presidente del Consejo de Estado, está presente en el mismo lugar que el de sus autoridades partidarias.


