La gran mayoría de los países latinos firmaron en Panamá en 1939 la “Declaración de Neutralidad”. El claro punto de inflexión fue el ataque japonés a la base norteamericana de Pearl Harlbor ubicada en Hawái en el año 1941.
Brasil fue el único país latinoamericano que aportó 30.000 hombres en el frente italiano, siendo un gran apoyo a los aliados. En 1942 los buques y submarinos alemanes hundieron 18 barcos mercantes brasileros.
Los barcos mercantes uruguayos eran tripulados por personal civil, negándose estos últimos a realizar tareas de navegación marítima comercial, por miedo a los ataques de navíos de guerra del eje. Ante esta situación, el gobierno uruguayo decidió que la marina de guerra se hiciera cargo de la mencionada operativa. El 9 de febrero de 1942, parte del puerto capitalino el carguero Montevideo cuya misión era llevar alimentos a Nueva York, su capitán era José Rodríguez Varela. Estaba embanderado con dos pabellones patrios y el nombre Uruguay estaba destacado. El 9 de marzo de 1942 y navegando en la zona del Caribe, se topó con el submarino italiano Enrico Tazzoli (nombre de un héroe de la independencia italiana). Este mismo estaba sobre la superficie y desde allí hizo un disparo con un torpedo de 45 cm que hizo impacto en el blanco, posteriormente lanzó otro torpedo de 53.3 cms. Reforzaron el ataque con 10 cañonazos que dieron en el buque uruguayo. A raíz del ataque fascista perdieron la vida los siguientes marineros uruguayos: Atiliano González, Alberto Caram, Sandalio Hernández, Juan Alanis, Ernesto Moledo, Mario Veglio, Lorenzo Oliveira, Rogelio García, Pío Amalio Costello, José Conde, Pedro Baygorri, Camilo Saralegui, Alfredo Ganduglia y Elbio Michaelson. En la plaza de la Armada (ex plaza Virgilio ) en Punta Gorda se recuerda a estos marineros con sus nombres puestos en uno de sus monumentos. Un salón de honor de la Escuela Naval del Uruguay lleva el nombre del mártir Elbio Michaelson.
El 1 de agosto de 1942, el vapor Maldonado navegaba en aguas del Mar Caribe. La tripulación uruguaya se había percatado que por espacio de 5 horas fueron seguidos por el submarino alemán el U 510. El buque uruguayo estaba perfectamente señalizado como perteneciente a un país neutral. En horas de la madrugada la nave nazi realizó 3 disparos de advertencia sobre la proa del Maldonado. El capitán del carguero uruguayo, Mario Giambruno ordena parar máquinas, mientras que, desde el submarino alemán, se le ordena mediante señales abandonar el buque. Los 49 tripulantes abandonaron la nave en 4 botes salvavidas, Luego de abandonada la nave uruguaya el submarino U 510 disparó un torpedo que hizo blanco en el casco. Y 10 minutos después realiza el segundo disparo que termina con el hundimiento del mercante compatriota. Durante 3 días los botes permanecieron juntos, pero luego se separaron a causas de varias tormentas. Un bote con 13 tripulantes uruguayos fue rescatado por el remolcador oceánico USS OWI y fueron llevados a Bermudas. El 6 de agosto otros 22 marineros fueron salvados con la ayuda del barco destinado al transporte de tropas Capetown Castle y desembarcaron en Haití.
El extraño caso del Capitán Giambruno
El capitán Giambruno luego del hundimiento fue tomado prisionero por los nazis y permaneció detenido en Alemania por espacio de tres meses. En su estadía en el submarino es interrogado en francés por los oficiales nazis acerca de la infraestructura del buque Maldonado. También, es indagado por la Marina Alemana, luego es liberado y llega a Uruguay en 1943. Al llegar a nuestro país la embajada de los Estados Unidos le requiere información sobre lo ocurrido, pero este se niega a brindarla. En la Armada Nacional es sometido a un Tribunal de Honor al que tampoco responde sus preguntas, y se determina su pase a retiro. Nadie sabe a ciencia cierta qué ocurrió si el realizó un pacto de silencio con los nazis o si abrazó dicha ideología.